Ella le aseguró que no había en la tierra nadie como él, que nada había más fuerte sobre la tierra que el amor que sentía y que, pasara lo que pasará, siempre estaría a su lado.
Él respondió que más que a nada y más que a nadie, que moriría de desconsuelo si ella no estuviera junto a él, que nunca había querido de aquella forma y que no había día en el que su pensamiento no fuera sólo para ella.
Y así se acostaron juntos, abrazados, besándose la nuca, los hombros y los labios.
Despertaron unos años más tarde, abrazando otro cuerpo pero repitiendo casi lo mismo y casi con las mismas palabras, sin recordar siquiera que se habían olvidado.
Con lo corto que es el relato, y hay que ver todo lo que dice!!!
ResponderEliminarPareciera que jamás vas a poder volver a amar como amaste a ese alguien, que jamás vas a encontrar a alguien que te ame como te amaron... Y es cierto, de la misma manera es imposible, simplemente por ser seres diferentes. Pero lo que sí es cierto es que es posible volver a enamorarse, y también volver a desenamorarse. En definitiva, es posible que todo vuelva a ser posible, lo bueno y lo no tan bueno.
Y es penoso darse cuenta de cómo se ha ido produciendo esa distancia, ese desamor.
Lo bueno es que quede algo bonito, una relación transformada. Yo brindo por eso.
Besos
Es cierto que lo malo es darse cuenta de cómo la distancia crece, pero creo que, como dice el cuento, hay un día que simplemente olvidas recodar y dar vueltas a la que no fue o lo que fue y no pudo ser, y las cosas dejan de doler como dolían, y terminan por pasar como el agua por el molino.
ResponderEliminarY contigo en eso de que lo más bonito es encontrar una nueva forma de relacionarse. Eso evita que olvidemos y propone una manera nueva de encontrarse. Chin-chin ;-))
Un besote
Los cuentistas...¿por qué ese título?
ResponderEliminarBesitos, Yesenia
Hola, morena.
ResponderEliminarPues porque es siempre (o casi siempre) el mismo "cuento". Como ves, nada especial ;-)
Un beso grande y gracias por estar ahí
Humm...ya. Siempre o casi siempre la misma historia, el mismo cuento...
ResponderEliminarBueno, yo pienso que es grandioso cuando se da un verdadero encuentro entre personas (a este nivel de profundidad o en menor grado, pero encuentro igualmente); cuando te vuelves a dejar ver y eres capaz de mirar más allá. En fin...
No tienes que dar las gracias,para mi es un placer leerte.
Por cierto, felicitaciones.
Un abrazo, Yesenia
Porrrrrrr supuesto que es maravilloso, y ahí está el milagro, que podemos amar con la intensidad de la primera vez (no igual, ni de la primera ni de la décima).
ResponderEliminarEs impresionante que uno o una, a pesar de las decepciones propias y ajenas, podamos llegar a nuevas relaciones y sentir como si no supiéramos que tiene final, aunque sea con la muerte.
Un besote grande ;-)